La dislexia es un problema del aprendizaje en el que hay incapacidad para desarrollar un lenguaje adecuado, en especial el escrito; es decir, niños con dificultades para leer o escribir, sin que presenten alteraciones en la inteligencia y ningún otro problema que explique el por qué de esta dificultad.
Los padres pueden sospechar este problema en etapas tempranas (cuatro a cinco años de edad): el niño presenta dificultades para hablar con fluidez, para articular palabras o memorizar canciones. También es probable que presenten trastornos en la percepción: identifican mal las estructuras de su cuerpo, la nariz la confunden con las orejas; se les complica distinguir entre arriba y abajo, derecha e izquierda, o invierten los colores, entre otros.
En edades más avanzadas (seis a nueve años), esta alteración se hace más evidente cuando los niños empiezan a leer y escribir, los maestros o los padres observan que el niño tiene dificultades para diferenciar los sonidos e imágenes de las letras, o palabras parecidas; la letra (p) la confunden con (q) o con (b), (ser) puede confundirse con (res), (pero) por (perro), por mencionar algunas. Por lo que, a medida que crece el niño, generalmente evita leer porque le parece difícil o estresante, lo que conlleva a rechazar la escuela, al fracaso escolar y a la depresión.
Causas:
No se ha identificado alguna causa orgánica, sin embargo, en algunos casos se ha observado que hay diferencia en el tamaño de los hemisferios cerebrales, principalmente en el izquierdo, el cual es el encargado de asociar los sonidos con la imagen de las letras, por lo que se les dificulta deletrear, escribir o hablar. Otra posible causa pudiera ser que los niños con dislexia procesan las palabras en alguna parte del cerebro diferente a la de los niños sin este problema, lo que orienta hacia causas genéticas. También se ha postulado que pueden influir los conflictos psíquicos, provocados por las presiones y tensiones del ambiente en que se desenvuelve el niño.
Por último, la dislexia pudiera ser la manifestación de una serie de trastornos que en ocasiones pueden presentarse de un modo global, aunque es más frecuente que aparezcan algunas de ellas de forma aislada.
Diagnóstico:
Lo más importante es hacer un diagnóstico oportuno, para no exponer al niño al riesgo de que sus compañeros lo hagan sentir mal o al retrazo escolar, lo cual puede afectar su autoestima. Como se mencionó con anterioridad, esto ocurre evidentemente entre los seis y nueve años de edad, cuando el niño empieza a leer y escribir. Los padres o los maestros identifican algunas de estas dificultades, por lo que el niño debe ser revisado por el medico de la familia o el pediatra, el cual debe examinar la vista, el oído y la capacidad motriz para detectar algún problema. Si no existe ningún trastornos en estas áreas, el niño será referido con un especialista para que le realice una evaluación formal. Esta evaluación generalmente incluye medir el coeficiente de inteligencia (IQ) del niño, y la capacidad de audición, visión y escritura.
Tratamiento:
Con la enseñanza y la asistencia apropiadas, un niño con dislexia puede aprender a leer y prosperar en la escuela, la mayoría de ellos son capaces de desarrollar estrategias que los ayudarán a permanecer en clases, y tener éxito en el mundo laboral. El niño con dislexia generalmente trabaja con un profesor, tutor o especialista en la lectura para aprender estrategias especiales para este tipo de condición. Sin embargo, es posible que se presenten muchas dificultades, por lo que el apoyo de los padres, hermanos y demás familiares es de suma importancia, con la motivación y ayuda para desarrollar la confianza en sí mismo.
La dislexia no tiene por qué ser un impedimento para el éxito. Existen artistas, atletas, científicos y figuras de estado que han podido alcanzar un desarrollo óptimo a pesar de tener dificultades con la lectura, como ejemplo de esto tenemos a Leonardo da Vinci, Thomas A. Edison o Albert Einstein, ellos eran disléxicos.
Si usted tiene un hijo o familiar con este problema, busque las áreas en las que el niño se destaca y ponga el énfasis en ellas. Un niño puede tener problemas para leer, pero ser un genio en matemáticas, música, u otros campos. Las computadoras son herramientas de aprendizaje especialmente útiles para estos niños, ya que permiten desarrollar habilidades para escribir que de otra manera no se podrían lograr.
bueno yo creo que esta la pag y las pregun tas tan bn tmb soy un joven de 18 con problemas de hiperactividad y ahora que voy usar el famosisiomo ritalin estoy biendo por mi cuanto como es esta nota hahaha ya que soy mayor de eDAD no kiero que me metan drogas me quemen el cerebro y me frikeen en mi forma de ser x) bueno saludos y a todas las mamis que les kieran dar esta pastilla a sus hijos solo por que no son muy buenos en el cole o no prestan mucha atencion o algunas cosillas asi vallanse ala pvta que las pario con cariño david bye
ResponderEliminar